Westvleteren XII 12

Cerveza belga trapense considerada por casi todos los expertos como la mejor cerveza del mundo . Su extraordinaria calidad y su carácter exclusivo hacen de ella una cerveza muy codiciada. Westvleteren XII debe su fama a un reconocimiento casi unánime por parte tanto de los críticos como de los propios consumidores. Los usuarios del portal cervecero Ratebeer le han otorgado una puntuación perfecta de 100/100 y se encuentra siempre entre las listas de las 10 mejores cervezas del mundo. Esta legendaria cerveza Quadrupel posee un color oscuro y es muy compleja y equilibrada, con un final seco y amargo.

Westvleteren 12 también es conocida como Westvleteren Abt y su botella no muestra ninguna etiqueta, tan solo un relieve en el cuello de la botella. Se distingue de otras cervezas de la gama por su tapón amarillo. Se elabora en la Abadía de Sint-Sixtus, donde se produce un total de tan solo 4750 hectolitros al año de sus tres variedades de cerveza. Esta producción está destinada a cubrir las necesidades de los monjes de la comunidad. Esto hace que sea una cerveza extremadamente de conseguir.

La historia de este legendario monasterio comienza cuando tres monjes procedentes de la abadía Mont des Cats en Francia llegaron a la localidad de Vleteren, Bélgica, donde fueron acogidos por un ermitaño. Uno de ellos, Dom François-Marie, fundó el monasterio en el año 1831. En el 1838 comenzaron a elaborar cerveza para consumo propio y la empezaron a vender al público en el 1931.

En 1946, debido al comienzo de unas obras de restauración, cedieron la licencia de la elaboración de sus cervezas a la fábrica de quesos de St Bernardus. Al caducar esta licencia, los monjes de St Bernardus siguieron elaborando cervezas con las recetas de St Sixtus. No fue hasta el 1992 cuando Sint-Sixtus comenzó a vender cerveza de nuevo al público, aunque en muy pequeñas cantidades. Brouwerij Van Westvleteren también elabora Westvleteren 8, una Dubbel de extraordinaria calidad.

Color caoba oscuro con espuma densa y persistente. Aroma complejo a malta de caramelo, pasas y miel. Sabor equilibrado a frutos secos, toffee, caramelo y malta tostada con presencia frutal. Final amargo y retrogusto persistente. Graduación: 10,3% alcohol.