Cerveza

De Halve Maan, leyenda y tradición cervecera en Brujas

Brujas (o Brugge, en flamenco) es una ciudad belga situada en la región de Flandes, cuyo nombre procede de la palabra vikinga “Brygga”,  que significa refugio o abrigo. Entre los siglos XI y XV Brujas fue el epicentro del comercio europeo gracias a su importante red de canales, lo que propició que fuese una de las ciudades más poderosas de Europa. Debido a una serie de circunstancias, fue perdiendo relevancia, hasta que en el siglo XX fue objeto de una restauración. Esta devolvió su antiguo esplendor a sus calles y edificios de estilo medieval.

Uno de los destinos más atractivos de esta encantadora ciudad es la cervecería De Halve Maan Brouwerij, donde se producen dos cervezas que encarnan el espíritu de Brujas: Straffe Hendrik y Brugse Zot. De Halve Maan es la única cervecería belga que queda en el centro de Brujas. Es una visita muy recomendable para los amantes de la cerveza artesana, ya que ofrece tours guiados y en su interior se puede disfrutar de una acogedora cervecería/restaurante.

De Halve Maan, el estandarte de Brujas

La historia de esta cervecería se remonta al año 1856, cuando Leon Maes, también conocido como Henri I, compró una cervecería situada en el centro de Brujas. En 1967, Henri II tomó las riendas del negocio. Lo primero que hizo al tomar posesión fue viajar a Inglaterra para hacerse con la última tecnología para su fábrica. Esto supuso una mejora importante en los métodos de producción. En los años 30, Henri III lanzó al mercado una cerveza Bock que creó usando técnicas innovadoras.

Esta cerveza fue todo un éxito para De Halve Maan y otorgó a la marca una gran notoriedad. Véronique Maes, hija de Henri IV, creó Straffe Hendrik en el 1981. Su nombre rendía homenaje a los Henri de la familia Maes. Para mejorar la logística de la fábrica, se construyó en 2016 una tubería subterránea cuyo objetivo era facilitar el transporte de la cerveza desde la fábrica hasta la embotelladora. De esta forma se evitaba usar las estrechas calles medievales de Brujas. En la actualidad, las cervezas de De Halve Maan son todo un símbolo de la cultura y la forma de ser brujense.

Brouwerij De Halve Maan

La leyenda de Brugse Zot

La cerveza belga Brugse Zot está inspirada en una leyenda medieval que comienza con la muerte en 1482 de la consorte del emperador Maximiliano de Austria, María de Borgoña.  Es a partir de este suceso que Maximiliano asumió la regencia de los Países Bajos. Este impuso su estricta moralidad y un aumento de impuestos a sus nuevos súbditos, lo que creó un clima de insatisfacción que provocó una rebelión. Cuando Maximiliano acudió en 1488 a sofocarla, fue apresado por los brujenses. Una vez fue liberado, prohibió las fiestas y celebraciones en la ciudad.

La respuesta de los ciudadanos de Brujas fue organizar una gran cabalgata en su honor, llena de personas con disfraces estrafalarios y bufones. A continuación solicitaron una audiencia donde le pidieron que levantase el veto a las celebraciones y permiso para construir un manicomio. A esto, Maximiliano respondió: ¡Cierren todas las puertas de Brujas, que ya tienen un manicomio! Esta anécdota les valió a los habitantes de Brujas el sobrenombre de “locos de Brujas” (Brugse zotten).

Brugse Zot Blonde

Brugse Zot Blonde es una cerveza rubia de estilo Blonde Ale, elaborada mediante alta fermentación y con segunda fermentación en botella, usando con cuatro tipos diferentes de malta y dos variedades de lúpulo aromático. Posee un bello color dorado, aroma frutal y especiado y un sabor amargo con presencia cítrica. 6% alcohol.

Brugse Zot Dubbel

Brugse Zot Dubbel

Belgian Dubbel elaborada con seis tipos de malta y lúpulo Saaz procedente de la República Checa. Brugse Zot Dubbel una cerveza de color oscuro, con aroma a malta tostada, miel, chocolate y azúcar moreno. Su sabor es cálido y complejo con toques a café y regaliz. 7,5% alcohol.

Straffe Hendrik Tripel

Triple belga elaborada con una selección de seis maltas y lúpulos Saaz y Styrian Golding. Es una cerveza dorada, de aroma a especias y hierbas. Su sabor es dulce y afrutado con final cítrico y una gran presencia del lúpulo. 9% alcohol.

Straffe Hendrik Quadrupel

Quadrupel de perfil evolutivo, elaborada mediante una selección de maltas que le otorgan su característico aroma especiado y tostado. Su sabor es sedoso, cálido y complejo con notas a cilantro, frutos rojos y nueces. 11% alcohol.

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